1. Contextos de la IAP:
La Investigación-Acción-Participativa (IAP) surge en Latinoamérica durante las décadas de 1960-1980 como una respuesta crítica a los modelos tradicionales de investigación social. Se desarrolla en un contexto de profunda desigualdad, donde los sectores más vulnerables - obreros, campesinos, indígenas - han sido históricamente marginados del conocimiento y las decisiones sociales. Su origen está marcado por un cuestionamiento radical a las epistemologías positivistas y eurocéntricas, buscando construir un conocimiento que no solo interprete la realidad, sino que la transforme. Figuras como Orlando Fals Borda y Paulo Freire impulsaron esta metodología como una herramienta para la emancipación política, económica y cultural de las comunidades latinoamericanas.
2. Implementación de aportes de la IAP en campos de práctica
La implementación de la IAP implica una transformación metodológica profunda en diversos campos:
En investigación social, significa romper la tradicional separación entre investigador y comunidad. Los saberes populares se integran como fuente fundamental de conocimiento, reconociendo la capacidad de análisis de los sujetos sobre su propia realidad.
En educación, la IAP propone pedagogías críticas donde el aprendizaje sea un proceso dialógico. Los educadores se convierten en facilitadores que acompañan procesos de concientización, más que en transmisores de conocimiento unidireccional.
Metodológicamente, implica:
-Sistematizar experiencias comunitarias
-Generar conocimiento situado y contextualizado
-Impulsar la reflexividad crítica
-Incorporar perspectivas de género, ambiental y territorial
-Vincular los procesos investigativos con movimientos sociales