¿Qué es la educación popular?
La educación popular es una corriente pedagógica que se distingue por salirse de los parámetros de la educación formal, abogando por una transformación social y la construcción de saberes colectivos, esto mediante la participación activa de la comunidad que no se enuncian como sujetos pasivos, sino como agentes activos portadores de conocimiento capaces de producirlo a su vez. Esta corriente tiene como objetivo la construcción de conciencias criticas en los sujetos, fomentando procesos educativos que vean más allá de las aulas, pensándose desde las realidades y necesidades de los territorios (Freire, 1970).
La educación popular propone una pedagogía que emancipe a los oprimidos, integrando las realidades de las comunidades en los procesos de enseñanza y aprendizaje, generando proyectos que permitan hacer frente a la desigualdad y construir identidades críticas, en la misma dirección, se trata de además de buscar el aprendizaje, estimular el compromiso ciudadano y la acción colectiva para transformar las estructuras sociales (Carmona Arboleda y Villalba Castaño, 2022). La educación popular tiene intrínseco el componente participativo porque conoce lo valioso de los saberes locales y de las experiencias de los sujetos como conocimientos legítimos.
¿Cuáles son los orígenes de la educación popular?
El origen de la educación popular se da en América Latina como consecuencia directa de la desigualdad y la exclusión que vivía la región en la segunda mitad del siglo XX, fueron los movimientos sociales y políticos que luchaban por la justicia social, la igualdad y el acceso a la educación los que nutrieron esta corriente. Paulo Freire, en Pedagogía del oprimido (1970) propone una pedagogía que se centre en la reflexión y en la acción como herramientas para la emancipación de las y los sujetos.
La educación comunitaria también resulta importante para la praxis pedagógica y la sistematización de experiencias pedagógicas como lo propone López Camacho en sus análisis entorno a la incorporación de la educación popular en los programas de la licenciatura en ciencias sociales. En la LECS la educación popular es configurada como una estrategia para articular los contenidos académicos con las problemáticas sociales, creando puntos de encuentro entre el saber académico y las realidades comunitarias (López Camacho, s.f.).
¿Cuáles son los aportes de la educación popular a las ciencias sociales?
La contribución de la educación popular a las ciencias sociales ha sido la configuración de una corriente que sitúa a las comunidades como el eje de importancia de los procesos de enseñanza y aprendizaje. Una corriente que permite aplicar el conocimiento teórico por medio del pensamiento crítico para hacer transformaciones materiales concretas en los territorios. Revindicando los saberes locales, se rescatan las experiencias y luchas de las comunidades como canales legítimos de conocimiento (Carmona Arboleda y Villalba Castaño, 2022).
La docente Adriana López a su vez hace énfasis en que la educación popular permite intervenir en la sociedad de manera transformadora, por medio de sus herramientas de análisis, que pueden ser prácticas pedagógicas que promuevan la justicia social, la construcción de propuestas alternativas emergidas desde los territorios o el fortalecimiento de las identidades colectivas (López Camacho, s.f.). Para finalizar, la educación popular es un puente que conecta la teoría, la práctica y la transformación social configurándose una relación trialectica en donde todas las partes son fundamentales.
¿Cuál es la relación que se establece entre la educación popular y el sujeto maestro en formación de la Licenciatura en Educación en Ciencias Sociales?
La relación entre la E.P y el sujeto maestro en formación es la capacidad del sujeto para manipular el conocimiento académico para que sea útil a las necesidades y experiencias de las comunidades, para que represente un aprendizaje significativo. Dicha capacidad da herramientas para que el sujeto maestro en formación apropie que la praxis pedagógica va más allá de la transmisión unidireccional de conocimientos, siendo así un agente disruptivo y transformador que impulsa procesos de enseñanza/aprendizajes emancipadores (Freire, 1970).
Carmona Arboleda y Villalba Castaño (2022) exponen como los programas de formación en ciencias sociales integran la E.P como un componente muy importante para que los sujeto maestro en formación promuevan prácticas educativas basadas en la participación. López Camacho (s.f.) también resalta que la E.P permite a los docentes abordar las desigualdades desde la clase, empleando estrategias que vinculen a los espacios de educación comunitaria con su contexto cotidiano siendo así el maestro un agente clave en los procesos de transformación de los territorios.
Bibliografía:
Carmona Arboleda, M. C., & Villalba Castaño, C. (2022). Escuela y comunidad: tejidos posibles para la transformación en los territorios. Cuadernos Pedagógicos, 24(33), 1–14. Recuperado de https://revistas.udea.edu.co/index.php/cp/article/view/349203
Freire, P. (1970). Pedagogía del oprimido. Siglo XXI.
López Camacho, A. Sistematización de la incorporación de la Educación Popular en el componente pedagógico de los programas de licenciatura en educación en Ciencias Sociales. [Referencia sin fecha].